Elementos históricos

La historia de la Juventud trabajadora está marcada de luchas por un mejoramiento de las condiciones de vida y de trabajo de los jóvenes de la clase obrera, a menudo marginalizados, a veces totalmente excluidos, siempre en búsqueda de más justicia y de dignidad.

Hoy como ayer, la buena voluntad no es suficiente para hacer entender su voz y hacer cambiar las cosas. Es necesario unirse para actuar, obrar a nivel local e internacional. En muchos casos, un apoyo financiero es indispensable para que las acciones desarrolladas conduzcan a los resultados esperados

La idea de crear una fundación apoyando los proyectos de los jóvenes trabajadores había ya germinado en los años 60.

La JOC internacional, movimiento creado por Joseph Cardijn en 1957, había tomado esta decisión en 1965 durante su consejo mundial de Bangkok, pero ninguna continuidad había sido dada en la práctica. Es en los años 90 que la idea resurge y toma forma sobre el nombre de Fundación Internacional Cardinj, o FIC, una institución fundada a la iniciativa de la JOC Internacional, pero funcionando de manera autónoma

La FIC se convierte hoy en AIC

Con el fin de extender su campo de acción, la FIC se convierte hoy en la AIC. Cambiando su denominación en Asociación Internacional Cardijn, queremos reforzar nuestra red y el apoyo a las acciones de los jóvenes trabajadores en todo el mundo.

La AIC lleva el nombre de Joseph Cardijn porque ella se inspira de sus ideas. Cardijn, nació en una familia obrera belga en 1882, él toma rápidamente conciencia de los problemas de los jóvenes trabajadores de la época, confrontados a una industria en pleno auge, centrada únicamente sobre el beneficio, en detrimento del bienestar y de la dignidad del mundo obrero.

Convertido en sacerdote, Cardijn se compromete en favor de una más grande justicia social. Su mensaje ¨Cada joven trabajador vale más que todo el oro del mundo¨.

La AIC tiene la intención de aportar su apoyo financiero a los proyectos implementados por los jóvenes trabajadores, con el fin de mejorar sus capacidades, de asumir responsabilidades y de cambiar sus condiciones de vida y de trabajo. Haciéndolo, estos jóvenes podrán encontrar, al interior de la sociedad, el lugar que les corresponde y la dignidad inherente a toda persona humana.